miércoles, 14 de diciembre de 2011

Autonomía y Heteronomía

En términos generales decimos que una persona posee Autonomía cuando tiene la capacidad de basarse así misma con la finalidad de conservar su propia individualidad frente a las demás personas incluso frente a la sociedad. En cambio cuando decimos que una persona carece de autonomía lo que queremos decir es que sus acciones están determinadas por otras personas o por la sociedad en la que vive, este tipo de persona es Heterónoma.


Con este tema nos podemos preguntar si somos unos individuos heterónomos o autónomos en cuanto a la toma de decisiones una persona autónoma es pues más o menos ser como tú eres frente a los demás e incluso frente a la sociedad y cuando se dice que una persona carece de autonomía o sea es una persona y heterónoma es que la demás gente toma decisiones por ella, él no lo hace por sí mismo.


Y aquí hablamos del filósofo Emmanuel Kant consideraba que ser moral es ser racional libre autónomo y que en esto consiste la dignidad del ser humano.


Los componentes externos son: contexto social código moral de la comunidad, religión que profesa un grupo de hombres, las tradiciones no religiosas que mantiene la comunidad y los actuantes morales. 


Los componentes internos o propios de la persona son: la decisión, el pensamiento, la acción y la congruencia entre el pensamiento y la acción.


La congruencia se define como la consecuencia plausible que puede tener un pensamiento o una acción.


Decisión, congruencia, pensamiento y acción son los componentes que permiten al individuo llevar a cabo la acción moral. La relación que mantienen entre sí la podemos explicar a través del proceso que posibilita una acción moral. Todas nuestras acciones se encuentran en un marco cultural indican que mantenemos una sociedad con tradiciones regiones e individuos en esta situación nos encontramos en momento de tomar una decisión primeramente pensamos cuales son las acciones que podemos realizar y sus consecuencias, podemos pensar que las consecuencias de nuestras acciones pueden afectar o beneficiar a las personas.


Según el filósofo Adolfo Sánchez Vázquez el acto moral es una totalidad o unidad indisoluble de diversos aspectos o elementos: motivo, fin, medios, resultados y consecuencias objetivos.

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